Debido a los daños estructurales en las vigas del muro fronterizo derivado de la antigüedad y la sal del mar, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza dio a conocer que los trabajos para hacer los cambios estructurales comenzaron desde el pasado 14 de febrero.
Esta nueva estructura tendrá un aumento de tamaño, con una medida aproximada de 30 pies (9 metros) de altura, aumentando el riesgo y la posibilidad de pérdidas de vida para los migrantes que intenten cruzar el muro.
El proyecto iniciado bajo la administración del ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y continuado por el actual Joe Biden, preocupa a los activistas miembros del binacional “Parque de la Amistad”, el cual podría sufrir daños ecológicos en el jardín.
Tania Mendoza, representante del parque binacional, ubicado entre los dos muros fronterizos y miembro del programa de “The Border Church”, declaró estar totalmente en desacuerdo con este trabajo.
Sin embargo, la oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés), anunció que este cambio sería positivo para las familias migrantes, ya que se prevé la posibilidad de volver a abrir la puerta del parque para que las familias puedan verse a través del cerco, acceso cerrado desde hace tres años.
