Amigos y seres queridos de  Marbella Valdez le dieron el último adiós en su funeral llevado a cabo  en un panteón ubicado en la colonia Aguaje de la Tuna.

“Marbella llegó a los 5 años conmigo al orfanatorio y su hermana de 6, creció con nosotros, participaba en trabajo aquí en la iglesia en lo que fue panderos, el arte, una niña muy buena y estudiosa”, explicó el pastor David López.

El cuerpo de la joven se colocó en un ataúd rosa, el cual era su color favorito, adornado con flores.

Altavoces, carteles, pequeñas banderillas de color blanco, familias y fotografías de mujeres desaparecidas, fueron los elementos protagónicos que se pudieron observar este Viernes a las 5:00 de la tarde, cuando comenzó la marcha de la paz en la rampa de la preparatoria federal Lazaro Cardenas en Tijuana. Con  una asistencia de más de dos mil 500 personas, entre  las cuales se encontraban mujeres, hombres, niños y adolescentes, unieron  sus voces para corear frases, que nos enchinaron  la piel más de una vez.

¨Se fueron vivas y vivas las queremos¨, ¨Ni una más¨ ¨¿Qué quiere el pueblo? Justicia ¿Cuándo? YA!!¨ son expresiones con las que los asistentes alzaron su voz.

Una marcha que comenzó a fuera del restaurante ¨Carnes el potrero¨ y que conforme avanzaba, se podía apreciar a unas cuadras después, cómo más personas se integraron para compartir el mismo objetivo, hacerse  escuchar.

Conforme avanzaron,  otra marcha venía en camino, una marcha realizada por feministas que al final del día también son nuestras hermanas y las cuales  también gritaban y se hacían notar por la misma razón que nosotros, por aquellas que ya no están.

En  un momento muy pequeño, separadas por un camellón ambas multitudes gritaban y celebraban su  encuentro, transmitiendo por una fracción de segundo, el sentimiento de apoyo y camaradería. Tranquilidad era lo que se respiraba en esos instantes.

Al llegar a la glorieta de Cuauhtémoc, los manifestantes continuaron pronunciando en voz alta los nombres de la personas desaparecidas, posteriormente se acomodaron en una zona donde pudieran ceder el micrófono con el que algunas personas subían y contaban sus historias y del por qué  eran partícipes de la marcha, algunas madres de familia contaron situaciones que vivieron hace varios años y de la cual aún no había respuesta.

Al grito de “Ni una Más”, un aproximado de más de mil 200 personas alzaron la voz por las cientos de mujeres desaparecidas y asesinadas en Tijuana.

Mujeres, niños, adolescentes y hombres se congregaron en el conocido “Monumento de las Tijeras” de Zona Río, con pancartas y reclamos de justicia marcharon hacía las instalaciones de la fiscalía del estado ubicada en el bulevar Sánchez Taboada.

Con altavoces, expusieron los dolorosos casos que han conmovido a la ciudad, en su mayoría crímenes de mujeres que han quedado impunes, tan solo en Tijuana son más de 25 este años y más 600 ejecutadas en los últimos 3 años.

Asimismo, pancartas y pintas con el nombre de las mujeres asesinadas recientemente en la ciudad fueron dejadas en las oficinas de la Fiscalía.