Un voluntario de India que realizó los ensayos de la vacuna producida en conjunto por el laboratorio AstraZeneca y la Universidad de Oxford contra el COVID-19 demandó por más de medio millón de dólares al responsable indio de llevar a cabo las pruebas.

Lala vacunación estuvo a cargo de Serum Institute of India, una institución demandada por el voluntario.

De acuerdo a medio indios, la semana es por cincuenta millones de rupias, alrededor 676 mil dólares.
Junto al monto de dinero, el voluntario también solicitó que se detengan de inmediato los ensayos de la vacuna en el resto de las mil seiscientas personas en las que se aplica.

La esposa del demandante contó que un momento su marido comenzó a sentir fuertes dolores de cabeza y luego comenzaron las nauseas y vómitos. La siguiente reacción adversa fue que el hombre parecía perdido y comenzó a desconocer a todo su entorno familiar.

En la institución médica lo recibieron con un "estado mental alterado y muy desorientado en tiempo y lugar". El voluntario estuvo internado entre el 11 y el 26 de octubre, durante ese lapso lograron estabilizarlo.

Ramakrishnan agregó que el comité de ética institucional del hospital donde fue tratado el paciente señaló que la reacción adversa no se debía a la vacuna. Sin embargo se desconoce, hasta el momento, qué la produjo.

Mohsen Fakhrizadeh , director del programa nuclear iraní según la Inteligencia occidental, fue sido asesinado el día de hoy en un ataque perpetrado en la localidad de Absard, cerca de Teherán, así lo anunció el Ministerio de Defensa.

Hombres armados abrieron fuego contra el vehículo del científico y llevaron al menos una explosión.

En el enfrentamiento, el equipo de seguridad que protegía a Fakhrizadeh también resultó herido.

Autoridades des iraníes, califican el acto de ataque terrorista y se lo atribuyen a la Inteligencia de Israel.

Fakhrizadeh, es considerado uno de los creadores del arsenal nuclear de Teherán, aunque la república lo niega.

El director ejecutivo del laboratorio AstraZeneca, Pascal Soriot, dijo que habrá la necesidad de llevar a cabo una prueba adicional que arroje más resultados sobre su efectividad, después de encontrar “diferencias" en los ensayos clínicos de su vacuna contra el coronavirus.

"Ahora que hemos encontrado lo que parece ser una mayor eficacia tenemos que validarlo, por lo que necesitamos un estudio adicional", dijo Pascal Soriot en entrevista con Bloomberg.

Tras anunciar, el pasado día 23, los resultados preliminares de la tercera fase de las pruebas, la universidad reconoció de manera implícita que a la hora de suministrar las dosis a los participantes de los ensayos se partió de un error.

Se conoció que las diferencias en la cantidad de las dosis administradas entre los diferentes grupos parten de una equivocación y que la dosis que obtuvo una eficacia del 90 por ciento se adjudicó a un grupo con muchos menos participantes, lo que para algunos implica cuestionar los resultados.