Maitland Jones Jr, un profesor de química fue despedido de la Universidad de Nueva York (NYU) porque 80 de 350 estudiantes firmaron una carta en la que le pidieron a la institución tomar cartas en el asunto, asegurando que las clases del maestro eran “demasiado difíciles”, quejándose de las calificaciones y de la enseñanza.
Sin embargo, la universidad fue más allá y lo despidieron. Jones explicó que recibió un mensaje del decano de ciencias finalizando su contrato. Debido a esto, profesores de química se opusieron a la acción y le escribieron una carta a distintos decanos de la universidad, expresando que les preocupaba que el caso pueda “socavar la libertad de los profesores y debilitar las prácticas docentes comprobadas”.
“Todos estamos del mismo lado de querer que los estudiantes tengan éxito, pero estamos usando métricas desalineadas y, en muchos casos, defectuosas para evaluar el éxito”, dijo Stephanie Lee, una de las profesores que firmó la carta.
Posterior al despido, estudiantes mostraron su desacuerdo ya que aseguraron que su protesta era porque las clases eran demasiado difíciles y que carecían de recursos y ayuda, y no que pedían el despido de Jones.
“Lo instamos a que se dé cuenta de que una clase con un porcentaje tan alto de retiro y calificaciones bajas no ha logrado que el aprendizaje y el bienestar de los estudiantes sea una prioridad y se refleja negativamente en el departamento de química y en la institución en general”, decía la carta.
Pese a esto, un vocero de la NYU defendió el despido del profesor debido a las “quejas sobre desdén, falta de respuesta, condescendencia y falta de transparencia sobre la calificación”.