Su nombre es Erik Morales Guevara y en 2015 fue conocido en Tamaulipas por detener a Julián Manuel Lozano alias el “Comandante Toro” jefe de plaza del cártel del golfo, considerado como uno de integrantes del crimen organizado más violentos de la entidad.

La historia del “Señor del Martillo” surge cuando en las redes sociales anunciaba sus operativos e incluso exhibía a los sicarios del cártel el gofo con vestidos y ropa interior de mujer, con los labios pintados y en ocasiones hasta los obligaba a besarse entre ellos.

Grupo Imagen tuvo una entrevista con Erik Morales, quien explicó por qué exponía de esa manera a los sicarios.

“Uno decide qué hacer. Ellos tomaron esa decisión de ser malandros y entre los malandros debe de haber alguien que mande, entonces por ende él iba a ser machista, mandón. Entonces cuando yo los agarraba lo hacía al estilo de una mujer y los humillaba. Hacía que se basaron con los demás, que bailaran, que posaran como mujer pues era una forma de humillarlos y recordarles que no siempre va a ser así como ellos siempre piensan que es”.
El rescate de un ex elemento de la armada de Estados Unidos que fue secuestrado en su rancho en Reynosa fue el inicio de su sobrenombre de “El Thor” o el “Señor del Martillo”. 

“Yo iba caminando y sin querer pisé ese machacador de carne. Cuando lo piso, le digo a la señora… para qué es eso y me dice que es un machacador de carne. Le pregunté que si me lo regalaba y me dijo que para qué y yo le dije… para golpear a los malandros. Cuando dije eso me agarró la mano y llorando me dijo… dales en su madre.

Una de ellas fue cuando ingresó domicilio de Silvestre Haro Rodriguez alias “El Chive”, presunto líder del cartel del Golfo en la ciudad de Tampico. El militar se llevó las cenizas del padre del capo y distorsionó una de las fotografías , esto provocó tanto el enojo del narcotraficante que le puso precio a la cabeza de MR THOR , ofrecía 5 millones de pesos.

Los métodos pocos ortodoxos de “Thor” dieron como resultado el debilitamiento de una fracción del cártel del golfo en Tamaulipas, con los aseguramientos de dinero en efectivo, armas y droga.

En la actualidad, lo único que se sabe es que se dio de baja voluntariamente de la Armada de México y que el crimen organizado ofrece cinco millones de pesos por su cabeza.