En Tijuana, miembros del colectivo Familiares Unidos Buscando a Nuestros Desaparecidos desenterraron un cadáver en lo que alguna vez fue una tienda de drogas al menudeo.
El descubrimiento se hizo después de que soldados del Ejército Mexicano, alertados por un denunciante, detuvieran a un vendedor de drogas en el lugar.
Tras su arresto, el individuo confesó que había cuerpos enterrados bajo una losa de cemento en la vivienda.
La Fiscalía General del Estado aseguró la propiedad y obtuvo una orden de cateo para investigar.
En una operación posterior, miembros del colectivo rompieron el concreto con mazos y encontraron un cadáver, presumiblemente de un hombre joven de más de 1.70 metros de altura con cabello algo largo.
La búsqueda de más restos continúa, ya que se sospecha que podría haber más cadáveres en la misma propiedad ubicada en la calle Bufadora de la colonia Ejido Francisco Villa.
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