Por si no lo sabes, el Lowrider es una especie de tuning que fusiona la cultura mexicana y estadounidense. Desde sus inicios, los autos clásicos como el Chevrolet Impala, Monte Carlo o Caprice, Cadillacs, Oldsmobile, y coches Ford, han sido los favoritos para aplicar esta técnica.
Su origen está ligado a la cultura chicana, actividad que fusiona elementos provenientes de México y Estados Unidos. Con el tiempo, estos no solo se integraron a la población latina, sino que también tuvieron acogida en la cultura afroamericana desde los años 70’s. Gracias a la cultura hip hop, los vehículos lowrider volvieron a ganar popularidad, haciendo posible su extensión en nuevos estilos de tuning como el popular ‘Bling’, un estilo “llamativo” dominado por accesorios de lujo y equipos electrónicos de notable poder.
En la actualidad, Estados Unidos es el país que tiene mayor cantidad de lowriders en todo el mundo (principalmente en estados como Los Ángeles, San Diego, Texas y Florida); luego le sigue México con una popularidad generosa en Baja California, Mexicali y Tijuana, en donde se realizan exposiciones de diferentes artes de la ciudad como en sus malecones y principales avenidas. En dichas exposiciones también participan “Lowrider bike” que se basa en la misma técnica pero en vez de aplicar el tuning a carros, se aplica a bicicletas, dándoles un estilo particularmente único.
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