Un niño de diez años pide al presidente de México, Adolfo Ruiz Cortinez, que construya una escuela, porque después de tercero de primaria, ya no había educación en Aranza, su pueblo. El mandatario cumple. Ese niño, ya en la secunda-ria, estudia el taller de linotipo. Muy joven llega a Tijuana y duerme en el piso de las instalaciones de un periódico, cubriéndose con los desperdicios del mismo diario, que con el tiempo, llegaría a dirigir.

"El Mexicano" se convierte en uno de los medios más influyentes de Baja California y México y desde ahí, se codea con los personajes de la política local, regional y nacional, dando continuidad a una relación con el poder que, quizá, inició desde su infancia.

La periodista Guadalupe Rivemar escribe estas anécdotas que narra, desde la primera persona, en la biografía autorizada: Eligio Valencia Roque.

De Aranza a Tijuana, una historia para la Historia, donde nos adentra en un relato que nunca imagi-namos, sobre la vida de una persona de influencia para Baja California, Eligio Valencia Roque
(1940-2023).